Este rosco de café es una receta que elaboré para celebrar el cumpleaños de mi marido. Como se que le gusta mucho el tiramisú, pensé en elaborar algun tipo de bizcocho que tuviera sabor a café; así que me animé a elaborar esta enorme bizcocho, digo enorme porque sale mucha cantidad, un poco más y no me cabía en el molde. Recomiendo utilizar un molde grande, reducir las cantidades o dividir la masa y hacer dos bizcochos.
Como durante la cena de la celebración sabía que algunos de los invitados tienen afición por las chuches, decidí decorar el pastel con dulces de todo tipo. (Y no, no había niños, pero creo que el gusto por algunos dulces no se pierden nunca)
Una manera de convertir este llamativo rosco en un pastel ideal para los más pequeños es sustituir el café por chocolate. Estoy segura que entonces triunfará entre los paladares más golosos ;)
Ingredientes
Para el bizcocho:
6 huevos
270gr. mantequilla
450gr. de azúcar
330gr. de harina
1 cucharadita de levadura
1 cucharadita de bicarbonato
225 ml de leche
1 cucharada de cacao en polvo
75 ml. de café espresso
75gr. chocolate blanco troceado
unas gotitas de esencia de vainilla Dr. Oetker
Para la decoración:
Virutas de chocolate Dr. Oetker
Corazones de chocolate Dr. Oetker
Cacahuetes con chocolate y caramelo de colores (tipo M&M's) y gominolas variadas al gusto.
Palitos de Mikado de chocolate blanco
Bolas de chocolate blanco y negro
Dulce de leche
Batimos la mantequilla derretida con el azúcar.
Añadimos los huevos y la esencia de vainilla.
Mezclamos la harina con la levadura y el bicarbonato. La añadimos a la mezcla junto con la leche, alternando ambas.
Separamos la masa en 2 partes.
En una de las partes añadimos el café y en la otra los trocitos de chocolate blanco.
En un molde grande con forma de rosco, bien engrasado o de silicona añadimos la parte sin café de la mezcla y luego añadimos la de café.
Horneamos durante unos 50 minutos. Iremos comprobando su cocción antes de retirarlo con un palillo. Debe de salir seco, sino aún nos quedarán partes por cocer.
Lo dejamos enfriar y lo abrimos por la mitad. Lo rellenamos de dulce de leche. Y lo decoramos al gusto.
Yo he derretido un poco de chocolate con leche y lo he extendido por encima. Y luego por encima he ido añadiendo todo tipo de gominolas y bolitas de chocolate. Lo he dejado en la nevera para que enfríe y la cobertura quede dura.
Si en el horno se nos tuesta mucho, podemos taparlo con papel de aluminio durante la cocción o podemos retirar la parte quemada y darle la vuelta (que es la opción que he tenido que hacer yo)
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