Una vez más os propongo una receta con hojaldre, uno de los ingredientes que más me gusta utilizar en la cocina por su gran versatilidad y resultado tanto en recetas dulces como saladas.
Esta receta se parece a la que ya publiqué hace unos meses: tarta de hojaldre con alcachofas. En esta ocasión el ingrediente principal será el calabacín.
Sin duda será una opción ideal para cualquier comida o cena, ya sea como plato principal o como aperitivo, presentándolo en trocitos más pequeños.
Ingredientes para 2/4 raciones
- 1 lámina de hojaldre (rectangular)
- 1 calabacín
- 1 diente de ajo
- 4 o 5 tomates secos
- 50gr. queso gorgonzola
- 2 o 3 cucharadas de salsa bechamel (opcional)
- 10gr. piñones
- pimienta, sal y ajo en polvo
- Limpiamos bien y cortamos los calabacines en trocitos pequeños.
- En una sartén con un poco de aceite salteamos el ajo picado y añadimos los calabacines. Salpimenatmos al gusto y dejamos que se pochen bien.
- Estiramos la masa de hojaldre (yo la he partido por la mitad y he hecho 2 raciones, podemos hacer 4 si queremos).
- Sobre la masa esparcimos un poco de bechamel (yo he puesto un poco de salsa de trufa). Podemos no agregar nada más, pero de esta manera queda más jugosa. El borde de la masa lo dejamos libre y lo doblamos.
- Añadimos por la tarta los trozos de calbacín ya pochado (mejor que haya enfriado), el tomate seco cortado a trocitos y los piñones.
- Desmigamos el queso gorgonzola y lo añadimos esparcido por la tarta.
- Finalmente horneamos a 180ºC durante unos 15 o 20 minutos. Una vez está la masa dorada ya podemos retirar y servir.