Con el hojaldre podemos hacer grandes maravillas, es tan versátil que nos vale para hacer un plato dulce como salado. En esta ocasión nos permite elaborar un dulce muy gracioso que será fantástico para ofrecer el día de la madre o en alguna ocasión especial.
Cuanto más fina cortemos la manzana mejor nos quedará. Podemos llegar a hacer la misma forma pero con algún otro ingrediente, por ejemplo con calabacín o zanahoria y convertiremos el plato dulce en salado.
Yo he puesto sólo 50gr. de azúcar para hacerla un poco más ligera, pero podemos poner azúcar al gusto, dependerá de cómo de dulce nos guste. También podemos utilizar azúcar de coco, que tiene menor índice glucémico.
Ingredientes
- 1 lámina de hojaldre
- 3 manzanas
- 50gr. azúcar de coco
- Ralladura de 1 limón
- 1 cucharada de canela
- 1 vaso de agua
- Pelamos las manzanas, las partimos por la mitad, y les quitamos el corazón. Las cortamos en láminas lo más finas posible.
- Las ponemos en una sartén con un poco de azúcar y las cocinamos uno minutos, sin que lleguen a quedar demasiado blandas.
- En un bol mezclamos el azúcar con la ralladura de limón y la canela. Mezclamos bien.
- Extendemos la masa de hojaldre y le añadimos la mezcla de azúcar por encima. Le pasamos el rodillo para que se impregne bien el azúcar, la canela y el limón.
- Cortamos tiras de 2 cm aproximadamente. Sobre cada tira colocamos las manzanas con la parte circular sobresaliendo del hojaldre. Enrollamos cada tira. (las manzanas deben estar frías, sino no podremos manipular bien el hojaldre)
- Colocamos cada tira enrollada sobre un molde de papel, para que se mantenga la forma y horneamos unos 25 o 30 minutos a 170ºC.
Y ya tendremos listas nuestras flores comestibles ¿Os apetece coger una?
Si queremos, una vez horneadas, podemos espolvorear un poco de azúcar glass para decorar.