La alcachofa es una magnífica hortaliza que nos brinda el otoño con la que podremos prevenir y mejorar problemas relacionados con el hígado, el colesterol y el ácido úrico.
Una de las características que tiene la alcachofa es que es muy diurética, de ahí que se recomiende en muchas dietas de pérdida de peso.
Entre sus vitaminas destacan las del grupo B (B3, B2, B1 y B6), la vitamina A y la niacina. También contiene hierro, calcio, fósforo, potasio, magnesio y sodio.
Es rica en fibra soluble, fitoesteroles, flavonoides, inulina y ácidos interesantes como el cafeoilquínico, el dicafeoilquínico, el cafeico, el oleico, el linoleico y el pantoténico.
Su consumo nos aporta hidratos de carbono y algunas proteínas.
FIBRA SOLUBLE
Su alto contenido en mucílagos nos ayudará con los problemas digestivos y metabólicos. Será una buena aliada para regular el tránsito intestinal y fortalecer el sistema inmunológico.
FLAVONOIDES
Gracias a la fibra soluble que contiene y a los flavonoides, la alcachofa nos puede ayudar a mejorar los dolores de cabeza y a controlar el colesterol (junto con los ácidos que posee) disminuyendo la presión arterial así como mantener una buena tonificación cardiovascular, por su efecto antioxidante.
ÁCIDOS ACÉTICO, OLEICO, LINOLEICO Y CAFEOILQUÍNICO
Gracias a estos ácidos la alcachofa tiene unas propiedades muy indicadas para proteger la función hepática y favorecer la función biliar previniendo la formación de cálculos biliares. Por este motivo no se recomienda que las personas que tiene piedras en la vesícula tomen alcachofas.
INULINA
La inulina es un carbohidrato que se metaboliza lentamente en el organismo que en lugar de generar glucosa nos proporciona fructosa, de manera que se convierte en un alimento ideal para personas con diabetes. De hecho, gracias a la inulina la alcachofa puede ayudar a reducir el nivel de azúcar en la sangre.
SU INGESTA Y CONSERVACIÓN
Se recomienda comerla cruda, para aprovechar todas las propiedades. Podemos hervirla y tomar el caldo restante, o cocinarla en el horno o a la brasa que también resulta deliciosa y muy beneficiosa.
Para asegurarnos que un vegetal tiene todas sus propiedades lo mejor es que tomemos la fruta y la verdura siempre en temporada, cuando la naturaleza la genera, hay que escuchar a la naturaleza... es sabia y nosotros tenemos que vivir en armonía con ella si queremos estar en armonía con nosotros mismos.
Las alcachofas cerradas y más pesadas son las más tiernas, así que ya lo sabes a la hora de elegirlas en el mercado.
Guárdalas en la nevera un plazo máximo de 6 días, dentro de un recipiente hermético o una bolsa porque se oxidan con mucha facilidad.
Si no quieres que se oxiden y se pongan negras al cocinarlas, un buen truco es dejarlas en remojo con agua y limón.
APLICACIÓN COSMÉTICA
También podemos hacer una decocción y aplicarla como un colirio natural por los ojos si los notamos secos.
ESPECIAL CUIDADO
Las mujeres embarazadas deberán tener especial cuidado con su consumo, pues puede disminuir la producción de leche.
Te dejo con 2 recetas del blog con alcachofa que están deliciosas
Tarta de hojaldre con alcachofas, tomates secos y gorgonzola