Esta receta es tan y tan sencilla que la uso cada dos por tres en mis aperitivos.
Se trata de una salsa donde el aguacate es el protagonista. Todos conocemos el famoso guacamole, en este caso, sería un guacamole a medias, pues le pongo muy pocos ingredientes: y es que me gusta así, simplemente con el sabor del aguacate. De hecho el aguacate por sí solo me encanta!
Ingredientes para 2 comensales
- 1 o 2 aguacates
- sal al gusto
- ajo en polvo al gusto
- un chorrito de limón
Pelamos los aguactes y les quitamos el hueso central.
Machacamos los aguacates con un tenedor, hasta que nos quede una crema (es conveniente que estén un poco maduros, sino será más difícil realizar este paso)
Sazonamos al gusto con sal y ajo en polvo (yo voy echando y probando hasta que encuentro el punto que me gusta)
Añadimos un chorrito de limón para que no se oxide a la vez que le da un toque ácido que combina muy bien.
Por último lo emplatamos y lo podemos servir acompañado de unos nachos, que en el paladar combinan espectacularmente.
Podemos añadirle las especies que queramos, a mí me gusta suavecito, pero si lo queremos más fuerte, podemos poner ajo crudo machacado, o cebollita picada, quizás un poco de pimentón, pimiento... dependiendo de nuestros gustos.