Hoy os traigo una receta que puede servir para vestir vuestras mesas en cualquier celebración del año. Yo la he elaborado para esta pasada Navidad y los comensales quedaron bien satisfechos.
Se trata de un clásico en los aperitivos: los canapés. Hay muchas versiones y maneras de elaborarlos. En esta ocasión se trata de unos canapés con pan bimbo de dos pisos y tres rellenos de sabor.
He elaborado 3 variantes diferentes. No voy a especificar una cantidad de ingredientes, pues dependerá de la cantidad de canapés que queramos hacer, y además, es una elaboración un poco a ojo.
Ingredientes
- 1 paquete de rebanadas largas de pan bimbo (en mi paquete habían 5 y las he partido por la mitad)
- mayonesa
- atún
- surimi (picado)
- humus
- pimientos del piquillo
- queso brie de untar
- paté de anchoa
- huevos duros picados
- olivas y gambitas para decorar
La elaboración de los 3 tipos de canapés es la misma, simplemente se trata de rellenar los dos pisos de cada sabor. Yo he utilizado unas placas de pan bimbo largas, que hoy en día encontramos en muchos supermercados.
La parte superior de cada tipo de canapé la he elaborado del mismo modos, con huevos cocidos muy picaditos. Para que se mantengan bien sobre el pan, previamente lo he untado con un poco de queso de untar o mayonesa.
Veamos cada uno de los rellenos:
Mayonesa, atún y surimi
Simplemente mezclamos la mayonesa, el atún y el surimi en un bol, las proporciones de cada serán a ojo, al gusto de cada uno.
Humus y pimientos del piquillo
Podemos elaborar nosotros alguna receta de hummus y seguro nos quedará más rica, o bien, para ahorrar tiempo adquirir alguno preparado del supermercado, como he hecho yo en esta ocasión. Lo mismo ocurre con los pimientos, podriamos llegar asar nosotros unos pimientos rojos, en lugar de utilizar unos pimientos del piquillo en conserva, yo tenía muchas elaboraciones a hacer en Navidad, por lo que opté por lo más cómodo: de compra.
Queso brie de untar y paté de anchoa
Simplemente elegimos un buen paté de anchoa y un buen queso de untar y untamos cada piso con cada uno de ellos, si queremos podemos untar ambos pisos con queso sólo o paté de anchoa.
Una vez hemos rellenado las placas de pan, simplemente tenemos que cortarlas en porciones que se puedan comer casi de un bocado y ya sólo nos quedará decorarlo, si queremos, con algún toque, por ejemplo yo he puesto media oliva negra, media oliva verde y una gambita encima de cada uno de los tres sabores, de este modo, también se pueden diferenciar mejor cada variedad.
Podemos guardar unas horas en la nevera, eso sí, mejor taparlos de alguna manera, con papel film transparente o algún recipiente que tengamos. De todas maneras, no lo recomiendo hacer de un día para otro si no queremos que se reseque el pan.
Espero que os animéis a realizar este entrante tan popularizado en las fiestas navideñas y celebraciones varias. Y me contéis vuestra experiencia en los comentarios o en las redes sociales.